Punta de La Monja – 20/02/2021

El día ya amanecía genial y con muy buenas sensaciones, pero cuando llegamos a la Punta de La Monja nos encontramos un auténtico lago, nada que ver con el mar movidito que siempre nos solemos encontrar por allí, muchas veces con olas y corriente. Hoy se podía entrar y salir por donde quisieras prácticamente. 

Formamos dos grupos independientes, de 3 y 4 personas siguiendo las medidas exigidas por el Covid-19 y el Nivel 3. La marea estaba muy bajita, así que se avanzaba cómodamente por las rocas hasta el mar. Entramos con mucha tranquilidad dando el paso de gigante como hacemos en el Muelle de Sardina. 

Nada más sumergirnos una señora sepia nos daba la bienvenida posada sobre una roca y sin inmutarse ante la cámara. Continuamos a 3 metros de profundidad por el veril hasta llegar al «ascensor» o «agujero» para bajar por la parte del arquito de uno en uno. Buceamos por la pared del veril y pasamos por el arco que como de costumbre, estaba lleno de vida: Seifias, Peces trompeta, sargos, burritos listados, roncadores, besugos, algún cangrejo araña protegiendo una anémona blanca…. Una vez pasado el arco, nos encontramos una Abade gigante que se escondía de nosotros metiéndose por los huequitos entre las rocas. Los siempre presentes bancos de roncadores y besugos (siempre andan juntitos), una anémona verde, etc. Un grupo de medregales, casi imperceptible, pasó cerquita de nosotros, una estrella multibrazo preciosa se movía sigilosamente hacia la cámara, y ya en la salida, por la zona del veril, había un grupito de jureles no muy grandes, y para sorpresa de muchos de nosotros un banquito, de MINI BICUDAS súper chulo, primera vez en la vida que lo veo… guapísimo. 

Los compis lo hicieron todo genial y creo que disfrutaron de lo lindo. Mañana volveremos a por más, eso seguro.

Tiempo fondo: 11 minutos por debajo de los 19 metros.
Paradas de seguridad: A 11 metros durante 1 minuto y A 5-3 metros durante 3 minutos.